Kilim vintage de Selendi, Turquía. 278x184 cms

Los kilims de Selendi se tejen tradicionalmente en bandas horizontales y se decoran con riqueza utilizando la técnica cicim, como se muestra maravillosamente en esta pieza.
En este ejemplo, las bandas anchas de color salmón están densamente adornadas con intrincados motivos cicim, mientras que las bandas más estrechas se dejan lisas o con decoraciones sutiles, creando un ritmo y contraste muy agradables.

También se han incorporado motivos protectores en forma de «S» en las estrechas bandas azules, aportando un toque simbólico a la composición.

Material: 100% lana de oveja hilada a mano

Tamaño: 278×184 cms

Origen: Selendi, Turquía

Tejido en los años 1970

Los kilims o Gilims son tejidos planos con una trama de lana sobre una urdimbre de lana de oveja, camello, pelo de cabra o algodón. Hay muchas técnicas y diseños diferentes. La tejedora trabaja  influida por técnicas, motivos y diseños específicos de un área o grupo étnico en particular. Los diseños normalmente se relacionan con el entorno natural, la protección, la fertilidad y la armonía de las relaciones familiares. Cada tejedora aporta algo de su propia creatividad y sentido de la composición. Los kilims a menudo se tejen como parte de una dote matrimonial y se pueden usar para crear multitud de objetos diferente como sacos de almacenamiento, mantas para caballos, portabebés, mantas y revestimientos para paredes y suelos.

Este kilim fue tejido a mano en un sencillo telar por una tejedora de un pueblo o nómada para uso propio. Probablemente la tejedora empleó lana de sus propias ovejas. Primeramente se limpiaba la lana, se cardaba a mano, se hilaba a mano y finalmente se teñía a mano, a menudo utilizando tintes naturales como raíces, nueces, bayas, frutas, flores y plantas. Los kilims del último cuarto del siglo XX suelen utilizar tintes sintéticos. Este kilim habría tardado muchos meses en completarse.

Todos nuestros kilims los seleccionamos en el país de origen y son lavados y restaurados profesionalmente antes de importarlos directamente desde Irán, Turquía y Afganistán. La pátina natural y las encantadoras imperfecciones en el diseño y el color (abrash) son características muy valoradas de los kilims tejidos a mano.